Consejos para vivir mejor: ¡cuídate!
Sólo te pido que de vez en cuando leas este post
¡Cuídate!
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Me descargaré para andar más ligera porque la vida es muy breve y no merezco estar sobrecargada y con mochilas que no me corresponden.
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Voy a parar, descansar, relajarme. Mi vida es mía y me permito vivirla.
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Voy a andar a mi ritmo y que cada cual lleve el suyo.
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No me voy a sentir presionada por los compromisos y no me sentiré culpable si no los cumplo.
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Me voy a respetar y voy a pedir el mismo respeto hacia mi a los demás. No voy a gastar todas mis energías en los demás para que me valoren pues ya soy valiosa.
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Mi presencia ya es suficiente no tengo que hacer más. No voy a cargar con pesos ajenos a mi en el trabajo ni en la familia, cada uno tiene que ocuparse de lo suyo.
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Desvaneceré mis miedos, en la vida hay mucha belleza y me arriesgo a explorar y emprender aventuras desconocidas.
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Me alejaré de las personas negativas que me restan energía. No aceptaré a estas personas frustradas, agresivas. Me niego a que me desanimen.
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No me complico la vida innecesariamente, buscaré el lado fácil de las cosas, la vida me permite crecer.
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Puedo tener secretos y cometer errores que no tienen por qué conocer los demás sin sentirme culpable.
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Me desacelero, saboreo la vida y la disfruto porque no soy perfecta ni quiero serlo.
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Me perdono por equivocarme, cometo errores y no por ello el mundo se va a hundir a mi alrededor. Siento que soy perdonada y me perdono yo misma. Merecemos mil oportunidades más.
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No entro en los juegos agotadores y morbosos de problemas enrevesados y sin salida. No seré el juez de nadie.
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No buscaré la aprobación de los demás a costa de mi esfuerzo. Si los demás me quieren tiene que ser porque sí sin que yo tenga que sufrir costosos esfuerzos.
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No esperaré, sino que saldré yo al encuentro de las aventuras que quiera afrontar. Mi tiempo es mío y no lo perderé esperando sin hacer nada.
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No dependeré de los demás, preguntándoles sobre lo que yo misma puedo descubrir. Yo estoy segura de mí misma. No aguantaré la rigidez ni la asfixia, soy libre por encima de todo.
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Estoy satisfecha sexualmente y vivo mi erotismo y sexualidad felizmente, sin vergüenza ni prejuicios. Tengo fantasías y puedo abandonarme a los placeres que la vida me ofrece.
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Busco mi equilibrio, ya no doy vueltas innecesarias como una veleta que no me conducen a ningún lugar. No me involucro en angustias y naufragios que no son míos, mi serenidad está en primer lugar.
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Crezco, aprendo y me desarrollo pero no a costa de sufrir.
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No vivo con prisas, no pasa nada porque llegue un poco tarde, puedo explicarlo y no supondrá una catástrofe. Mi tiempo lo controlo yo.
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Utilizo todos mis sentidos, mi sensibilidad para disfrutar de todo lo que me rodea: un paisaje, una risa, un suave jersey…
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No siempre estaré alegre, si estoy triste o enfadada o con ira, me lo permito y si es necesario, pido ayuda.
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Soy una persona con salud, gozo de buena salud porque me cuido y respeto, sin provocarme enfermedades por llevar otro ritmo que no es el mío. Me alimento bien, duermo y hago ejercicio para seguir gozando de buena salud.
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Disfruto de mi trabajo, de mis obligaciones y no me fatigo innecesariamente con tareas que no me corresponden.
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Al igual que doy mi ternura, mi cariño y mi amor a quien yo quiera, puedo ser fría y distante también con quien yo decida.
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No dejaré que existan jueces en mi vida, ni idealizar a personas autoritarias que me hacen sentir inferior. Yo soy tan valiosa como todos los demás. No me sentiré ni victima ni verdugo.
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Ya no me obsesiono por controlar todo, es imposible, dañino, agotador y siempre insuficiente. Puedo vivir en un cierto desorden y descontrol y así no gastaré mis energías.
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Me río de mi misma, de muchas circunstancias que me ocurren. Sonrío a la gente que quiero y me tomo con humor muchas cosas que antes me agobiaban.
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Me alejaré de los miedos que me bloquean y me impiden seguir adelante. No me preocuparé de los problemas antes que hayan aparecido porque muchas veces se resuelven por sí mismos.
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Actuaré, pasaré a la acción, me expreso y comunico naturalmente, ya no más posponer, comienzo ya a cuidarme.
Qué bonito post y cuánta razón tienes!!!
Es sencillo cuidarse pero también hay que dedicarle tiempo y esfuerzo, por eso os pido que de vez en cuando tenemos que recordar que nos lo debemos, nos lo merecemos. Un beso Mónica