Jugar con la vida
Voy a jugar con la vida
Disfrutando cada momento, repartiendo mi sonrisa
A pesar de lo que cuente hoy el tiempo. Y cantaré al universo,
A la gente, al amor, y a ese pequeño y travieso duende
Que me acompaña en el camino, eliminando los frenos que impiden mi evolución.
Voy a jugar con la vida
Haciendo germinar en tierra fértil, semillas de comprensión
Para disipar las sombras, para ver mi propia luz y mí interno amanecer
Deshaciendo nudos invisibles que oprimen mi corazón y menguan mi fortaleza.
Voy a jugar con la vida
Uniéndome a los elementos, tierra, sol, agua y viento, para nutrir mi océano
Sintiendo y actuando desde mi espíritu inquieto, que me grita en todo cambio, ¡¡adelante!!
Para desplegar mis alas alcanzando las estrellas, meciéndome en una cuna de amor.
Voy a jugar con la vida
Riendo, cantando, bailando descalza, al son del ritmo infinito del corazón de la tierra
Atrapando una nube con mis manos limpias, para guiarla a mi huerto
Para regar mi cosecha con agua del cielo, polvo de luna y estrellas y la mano de mi niña
Que mirará embelesada, con su sonrisa al viento y su alegría infinita.
Voy a jugar con la vida
Para aportar mi granito de esperanza, con bellas flores de amor y libertad
engendradas para un nuevo paradigma, donde la igualdad sea verdad
Con una canción de dicha y felicidad en el corazón del mundo y de toda la humanidad.
María Castejón, Directora de El Camino Turismo Rural