Me doy permisos…
Separarme de personas que me traten con brusquedad, presiones o violencia.
No acepto ni la brusquedad ni mucho menos la violencia aunque venga de mis padres de mi marido, o mujer, ni de mis hijos, ni de mi jefe ni de nadie.
Las personas bruscas o violentas quedan ya, desde este mismo momento, fuera de mi vida.
Soy un ser humano que trata con consideración y respeto a los demás, merezco también consideración y respeto.
Me doy permiso para…
No obligarme a ser el «alma de la fiesta»,
el que pone el entusiasmo en las situaciones,
ni ser la persona que pone el calor humano en el hogar,
la que está dispuesta al diálogo, para resolver conflictos cuando los demás ni siquiera lo intentan.
No he nacido para entretener y dar energía a los demás a costa de ahogarme yo:
no he nacido para estimularles con tal de que continúen a mi lado.
Mi propia existencia, mi ser, ya es valioso.
Si quieren continuar a mi lado, deben aprender a valorarme.
Mi presencia ya es suficiente: no he de agotarme haciendo más.
Me doy permiso para…
no intentar controlarlo todo:
la casa en perfectas condiciones, la mesa de trabajo completamente ordenada, el trabajo perfecto, las relaciones sin roces ni imperfecciones.
Obsesionarse por mantener el control es algo extraño a la vida, es una fantasía dañina.
El intento de control constante bloquea a las personas y les priva de una enorme cantidad de energía
que podrían canalizar hacia la creatividad. Intentar mantener un exceso de control da como resultado el agotamiento.
Acepto un relativo desorden e incertidumbre que me permita disfrutar de la vida en vez de dejarme exhausto física y psicológicamente.
Joaquin Argente «Me doy permiso para…»
Me doy permiso para… felicitarte por este post tan, tan clavado. Empiezo el lunes con la impresión de que yo soy como soy y listo, así que soy única. Y me encanta el dibujo 😀
Cierto Mónica, está todo basado en que nos tenemos que valorar ¿verdad?
Una muy buena filosofía de vida, ojalá supiéramos canalizarla cada día así…
Unas gracias.
Unos besos de… ya sabes… de los de lunes.
Nos lo podemos permitir, vamos a darnos ese permiso. Besos de lunes con un poco de sol 🙂
No sabes cuanto me gusta este post…. mmmmmm¡¡¡¡¡
Gracias mil. Fem.
Besitos arcoIris de lunesFeliz
Me alegro mucho. Me gusta compartir lo que a mí me ayuda. Un beso multicolor 😉
Me doy permiso para venir a tu rincón y encontrarme con entradas como ésta que me hacen reflexionar.
Gracias, femeniname.
Gracias, Chelo. En la reflexión hay encuentros…
Y viene muy bien ejercitarla de vez en cuando.
Desde hace tiempo vengo llevando a efecto aquel consejo que nos diste en un post sobre hacer repaso cada noche de las cosas positivas que nos habían ocurrido durante el día, y puedo decirte que fue un consejo que me ha ido muy bien. Ahora seguiré los consejos de este post -algunos ya los pongo en práctica- porque todos tenemos que darnos permiso para ser un poco más felices, o al menos intentarlo. Gracias Alicia por estas fantásticas entradas.
Gracias a tí, me alegro que sirva de ayuda. Como antes he comentado, me gusta compartir lo que a mí me viene bien. Un beso
Muchas gracias, a veces no hace falta escribir uno las cosas,gracias. Un abrazo.
Bienvenida Paloma 🙂
Me encanta! Gracias por una nota de positivismo para seguir la semana (aqui la empezamos ayer :)).
Con tu permiso la comparto en FB.
Un abrazo
Para eso está, para compartirlo. Un abrazo de oso 🙂
Me voy a dar persmiso para tus permisos 😀
Jaaaa, permítemelo. Besos
Me apropio de todo lo que dices, otra cosa es que pueda cumplirlo
Besos
Ana
Seguro que puedes cumplirlo, no hay que intentarlo, hay que conseguirlo 🙂